Vivo metida en un círculo asfixiante. Las cosas que me tocan nunca tienen un fin, o si lo tienen lo paso de alto, nunca aprendí a plantarme y decir stop. La noche siempre me encuentra despierta, espiando por alguna hendidura, restos de algo que pudo ser. Sin embargo la sigo remando como quien recién empieza el recorrido, con las mismas fuerzas y ganas de un infante. Porque nunca aproveché las cosas cuando se me dan las oportunidades, no, siempre tengo que salir a buscarlas una vez que ya están lejos.
Y me sorprende que me haya caído mal la noticia, si ya la sabia de ante mano. Porque cuando me creo convencida de que estoy acostumbrada a la situación, aparece ese sentimiento horroroso que guardo dentro mio. Porque todavía no me acostumbro a verte como una simple persona, porque aunque lo esconda muy dentro sigo siendo esa que lloraba en las noches por vos.
1 comentario:
es como que en ciertas partes te entiendo mucho porque es lo que me está pasando, pero en el resto de las cosas te entiendo también porque me pasaron. no puedo decirte mucho, pero con el tema de las oportunidades... creo que a todos nos pasa, sino mirame a mi, buscando ahora la oportunidad que dejé pasar, creyendo que se la negaba a otra persona cuando en realidad me estaba negando a mi misma la posibilidad de ser feliz...
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