¡La literatura SI enloquece!

Siempre dije que la literatura llega a tal punto de enloquecer a una persona. Y a esto lo veo comprobado en las profesoras de literatura que he tenido estos dos años. No digo que no me lleve bien con ellas, es más, con la del año pasado me llevaba tremendamente bien y era mi profesora en el taller de literatura. Corte carré, flequillo, largas bufandas, mirada picara y profunda, ropa extravagante, polleras de colores. Sin embargo, este año tenia a una más joven (24 años o más), que todavía el arte de los libros, las palabras y las letras no le habían invadido la cabeza. Hoy nos anunciaron que renunció, por lo tanto tuvimos una nueva. Esta vez, me encontré con un ejemplar que desconozco, pero pude darme cuenta que es amante de la literatura nacional. Es una anciana, con un corte bastante raro pero corto, anteojos y una mirada que te rompe en mil pedazos. No es que me caiga mal, pero tengo que el presentimiento que desde que dijeron que era la única en el curso interesada en la lectura como una ''forma de expresión'', comenzó a mirarme raro y cada vez que pedí ejemplos me señalaba a mi. No me molesta, pero tenes 19 alumnos y justo me venís a preguntar a mi, con mi voz afónica, la cabeza que se me partía en dos y justamente, la más charlatana.

Ni sé porque escribí esto, solo deje que mis dedos se deslicen sobre las teclas y es lo que salió.