Un dia en la vida.

No es que tenga nada contra el profesor, pero ¿me pueden decir que hice para sorportar 80 minutos de gimnasia en contraturno todos los lunes? Sin contar que nos hace trabajar con pelotas de basquet al rayo del sol, con el estomago vacio o peor aún, a punto de despedir el sandwich del kiosko con el baggio caliente.

No me hago la que voy siempre, porque siendo sincera el año pasado aprobé por suerte, habiendo asistido solo a las clases del ultimo trimestre por falta de nota en los dos primeros (si, faltaba siempre).

No soy de las mas vagas, pero diganme, ¿a quien le gustaria quedarse en el colegio pasadas las 1 a correr, a vernos las caras entre todas y hablar siempre de las mismas cosas?, sin contar que tengo que esperar 20 minutos religiosamente a que me vallan a buscar, sumandole el viaje de 15 minutos hasta casa.

Calor, sed, hambre, sueño. ¡Que linda combinación me espera este año!