Estoy perdiendo en esta guerra contra mi

   Son muchos ladrillos que se van acumulando a medida que caen. Algunos caen y se acomodan, puedo seguir normalmente aunque los vea todo el tiempo, aunque pesen en mi espalda. Es como si todo girara en torno a esos ladrillos, que pesan mucho o poco, pero a fin de cuentas pesan. Se van uniendo, quedan encimados, uno necesita del otro, como cadenas. Están ahí todo el tiempo, aunque de vez en cuando deje la mochila en el suelo para olvidarme en sueños donde estoy.
   Así podría describir mi vida.
   En este momento un ladrillo cayó, si, uno más. Fue directo a mi cabeza, esta vez pensé luego de actuar como es de esperar, esta vez el atentado fue contra mi.

   Y lo voy a seguir haciendo.