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sábado, 24 de agosto de 2013

(otra vez la misma historia)

   ¿Viste cuando crees que tenes todo bajo control y de pronto sentís caer los ladrillos del muro que construiste entre los sentimientos del corazón y vos sobre tu propia cabeza? Definitivamente es la historia de mi vida. Siempre construyendo paredes para poder, de algún modo, olvidar. Pero siempre se termina derrumbando, siempre vuelven, son más fuerte que yo.
   Siempre traté te tapar las cosas que me pasaban con otras, siempre elegía un pasatiempo para mantener mi cabeza centrada en otros asuntos y que no me atormenten los recuerdos, o en este caso, sentimientos.
   Repito: es más fuerte que yo.
   Intento, juro que intento, centrarme, seguir, pero en un mes me transformé en una persona totalmente distinta a la que era. Y aunque trato, no puedo volver de donde estoy (los optimistas que se guarden sus comentarios).
   Me asusta tanta soledad, estar rodeada de gente pero sentirme tan sola, haber perdido una gran oportunidad por tratar alargar una relación que tiene los días contados, que es imposible llevar adelante. Siempre creí que el amor a distancia no funciona, y hoy, 6 meses después, sigo pensando lo mismo.
   Es insoportable estar sola todo el tiempo, hablar con otras personas como si nada, no poder decir lo que siento, que no quiero estar acá, que extraño y me siento sola.
   Pensé que se me había pasado, que el tiempo hizo su parte y yo la mía.
   Me equivoqué. Solo logre mantener la cabeza ocupada en otras cosas, pero en días como estos, que me siento tan sola, todo vuelve.
   Y no saben lo mal que me hace.





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